La Policía Nacional ha detenido en Málaga a un hombre de 27 años por, presuntamente, robar y matar el pasado 20 de enero a un turista estadounidense que estaba de vacaciones en la capital malagueña. La víctima, identificada como el sacerdote Richard Gross, tenía 80 años y se encontraba alojado en un piso turístico cuando ocurrieron los hechos. Al arrestado, que cuenta con antecedentes penales, se le investiga por los delitos de homicidio y robo con violencia, según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA). El juzgado de instrucción número 2 de Málaga ha acordado su ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza.
El religioso se encontraba en la ciudad malagueña de visita cuando, apenas unas horas después de llegar, fue asaltado al entrar al apartamento que había alquilado en el centro histórico. Su cuerpo fue hallado el 21 de enero con signos de violencia, aunque la investigación policial apunta a que su muerte ocurrió un día antes. Se encontraba en el suelo, en el interior de la vivienda, ubicada en la calle Viento. Los indicios recabados por los agentes apuntaban a un robo, puesto que faltaban algunas pertenencias del sacerdote, como una maleta. La autopsia posterior reveló que el fallecimiento se produjo por asfixia. “El padre Gross murió trágicamente mientras se preparaba para embarcarse en un crucero en Málaga, España, para servir como capellán”, aseguró la comunidad jesuita donde ejercía de cura en un comunicado lamentando su fallecimiento.
El Grupo de Homicidios de la Policía Nacional arrancó una investigación para aclarar lo sucedido. Varios testigos aseguraron entonces que habían escuchado algunos gritos la durante la tarde noche del día 20 de enero, pero que no habían visto nada. La semana pasada, los agentes identificaron y localizaron al supuesto autor de los hechos. Se trata de un hombre de 27 años que cuenta con antecedentes penales. Fue detenido el pasado domingo, 2 de febrero, acosado de los delitos de homicidio y robo con violencia, aunque su arresto no ha sido conocido hasta este miércoles.
Tras su traslado a dependencias policiales, el joven se acogió a su derecho constitucional a no declarar. Después, el juzgado de instrucción número 2 de Málaga, en funciones de guardia de detenidos, acordó su ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza, según fuentes del TSJA. Las diligencias se encuentran bajo secreto.
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