
“Es un tremendo honor recibir este Premio Bitácora. Esto es fruto del trabajo compartido, con la unión entre los pueblos por donde se transita el Camino de Brochero. Hoy, el turismo religioso se está convirtiendo en uno de los principales atractivos y es algo que rompe con la estacionalidad de la temporada de verano. Una noche maravillosa y más que agradecido por este premio que nos llevamos a la Traslasierra”, expresó Oviedo.
UNA BANDERA PARA EL TURISMO RELIGIOSO
El Camino de Brochero es una experiencia que combina naturaleza, espiritualidad e historia, ideal para quienes buscan recorrer los pasos del primer santo argentino mientras disfrutan de los paisajes serranos. En esta ruta es posible realizar el tradicional Camino del Peregrino, adentrarse en los distintos senderos de trekking de Villa Cura Brochero o conectar con la vida y obra del “Cura Gaucho” a través de un recorrido histórico-religioso por los sitios de su infancia y formación en Villa Santa Rosa y Córdoba capital.
Entre las actividades más destacadas se encuentra el Camino del Peregrino, un recorrido de aproximadamente 28 kilómetros que inicia en las Altas Cumbres y concluye en Villa Cura Brochero. Puede hacerse a pie, a caballo, en bicicleta o incluso en vehículo, y está señalizado con ocho estaciones especialmente pensadas como espacios de descanso y reflexión. Los visitantes suelen llevar ropa cómoda, calzado adecuado y provisiones como agua y alimentos. Además, existe un pasaporte gratuito que permite sellar cada etapa como recuerdo de la travesía.
Villa Cura Brochero también ofrece una amplia red de senderos de trekking para todos los niveles, como los caminos hacia la cascada La Gloria, la cuesta de Altautina o la ruta que une La Toma con Los Chiflones. Uno de los más elegidos por quienes desean desconectarse es la Cuesta Vieja de Brochero, un sendero panorámico que demanda cerca de tres horas de caminata.
