La división hotelera del fondo suizo Stoneweg cierra una primera etapa exitosa en España, donde ha invertido 450 millones en siete activos, con la inauguración este pasado jueves del nuevo hotel Kimpton Los Monteros en Marbella, adquirido conjuntamente junto a Bain Capital por 47 millones en 2022 y al que ha sometido a una intensa reforma en la que la propiedad ha desembolsado otros 40 millones de euros.
El hotel, que representa uno de los iconos del lujo en Marbella y que ha sido frecuentado por famosos y celebrities tanto nacionales como internacionales desde que abrió sus puertas en 1962, luce desde el jueves la marca Kimpton, una de las diecinueve enseñas del gigante hotelero IHG, la cuarta hotelera del mundo por tamaño, solo por detrás de las estadounidenses Marriott y Hilton y la china Jing Jian. En Europa solo hay nueve hoteles de la marca Kimpton y en España solo había hasta este momento dos, situados en Mallorca y Barcelona. “Queríamos modernizar mucho el hotel, pero sin perder la esencia de un activo muy valorado en la zona y que cuenta con un gran número de clientes fidelizados en otros países, que están enamorados de Los Monteros y que no queremos perder. Esa conjunción es muy sutil y engranar bien el concepto de hotel nos ha llevado mucho tiempo”, revela Miguel Casas, director general de Hospitality de Stoneweg, en una entrevista con Cinco Días.
Los dos principales cambios que quieren activar en el nuevo Kimpton Los Monteros, con 195 habitaciones, son la ruptura de la estacionalidad, para atraer clientes más allá de la temporada alta, y ampliar el número de mercados emisores. “El hotel cuenta con un salón enorme para la celebración de eventos, hay dos campos de golf a dos minutos, tenemos un gimnasio y un spa muy potentes y además contamos con un restaurante de José Carlos García, cocinero con un estrella michelín en el hotel, y con otro restaurante de Dani García, cocinero con tres estrellas michelín, en La Cabane, el beach club más grande de la zona, en el que se ha asociado con el grupo Mosh y en el que también colabora Dolce Gabanna”, recalca Casas.
Los dueños del hotel auguran que el rango de tarifas oscilará entre los 500 y los 1.000 euros por persona y noche, con un precio medio de 700 euros, por debajo de otros iconos de la zona como Puente Romano o Nobu, pero en línea con el hotel Don Pepe. “En verano, el cliente es tradicionalmente nacional y no queremos perderlo. Incluso estamos dispuestos a potenciarlo porque vemos que tiene recorrido. En cuanto al cliente extranjero, los grandes mercados seguirán siendo el británico y el alemán, con un peso cada vez más creciente para Francia o Benelux, y especialmente el estadounidense”. Casas augura que este último mercado experimentará un fuerte crecimiento en los próximos ejercicios por el elevado conocimiento de marca que existe en EE UU. “Kimpton es una enseña americana y tiene ya mucha presencia en Nueva York o Los Ángeles, lo que ha servido para nutrir el programa de lealtad IHG One Rewards. Este cuenta con 130 millones de clientes en todo el mundo y es uno de los canales de comercialización más importante de muchos de los hoteles del gigante estadounidense”.
Con esta operación, Stoneweg Hospitality, la división hotelera de la compañía, posee en la actualidad una cartera de seis activos en toda España, la mitad de ellos en operaciones junto a su socio preferente Bain Capital y la otra mitad a través de su fondo de hospitality al 100%. Entre ellos está Alua Menorca, Hard Rock Hotel Marbella, Kimpton Los Monteros Marbella, Hotel Mongibello Ibiza, Sarena de Muro (Mallorca) y Alua Soul Costa Adeje (Tenerife). En el catálogo también estaba el hotel Mimic (renombrado como Casa Lit Barcelona), que adquirió en 2023 por 20 millones de euros y desinvirtió 24 meses después vendiéndoselo al grupo hotelero Gargallo por un montante cercano a los 35 millones de euros.
Casas reconoce que ya están inmersos en los preparativos para levantar un segundo fondo hotelero, en un estado preliminar, aunque reconoce que el foco ya no estará puesto en exclusiva en España, sino que se ampliará a otros destinos como Italia, Grecia o Portugal, gracias en gran medida a las importantes sinergias que le ofrece la adquisición de la plataforma Cromwell, cerrada el pasado mes de mayo por 280 millones de euros, lo que les servirá para entrar en nuevos mercados de forma natural.